La realidad onírica

Los sueños parecen más fáciles de alcanzar en primavera, pero yo, dejando latir mi herencia extremeña y meridional, ahora siento que nunca he dejado de soñar despierto, hasta el punto de que ya no puedo ni quiero despertar, porque al hacerlo, dejaría de existir, de la misma forma con que los dioses dejaran de soñarnos.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Es preciso tener un caos dentro de sí, para poder dar a luz una estrella fugaz.
Julián ha dicho que…
Como la hiedra a una pared seca
la ensoñación se aferra a tu alma
Sueños de arcilla ha dicho que…
Me gustaria visitaras http://www.creenloinvisible.com/
Gracias.